Asturias acoge una cumbre del sector de defensa mientras la industria europea gira al rearme

L.O.

ASTURIAS

Con la entrega pendiente de los primeros Avril, Puente advierte de que Talgo posee una tecnología «crítica» y la preocupación por la OPA húngara sobre la compañía

16 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace tiempo que suenan muchos tambores de guerra y con más intensidad en las últimas semanas. Y la industria militar en Europa se prepara para un rearme relevante. En un horizonte muy complejo en el que la guerra de Ucrania se prolonga, crece el temor de que pudiera estallar un conflicto regional (o algo peor) en Oriente Medio, y en todo caso, con la constatación creciente entre los dirigentes europeos de que el protectorado de EEUU sobre el continente tras la Segunda Guerra Mundial llega a su fin gane o no gane Trump; la producción de material bélico se está incrementado a marchas forzadas. Y Asturias no es ajena a este fenómeno, de hecho es un puntal de la reindustrialización regional y la apuesta por la innovación.

De hecho está fijada en el calendario un encuentro, toda una pequeña cumbre del sector de Defensa, a finales de este mes de abril en el Parque Científico Tecnológico de Gijón con el objetivo declarado de «dar a conocer a la industria asturiana de defensa y a la industria general del Principado de Asturias los apoyos que se pueden ofrecer desde el Ministerio y las oportunidades que existen en el ámbito de la defensa».

Fue precisamente en abril pero de 2022 cuando se constituyó en la comunidad la Asociación Empresarial de Tecnología de Asturias para el Desarrollo de la Industria de la Defensa Ingeniero González-Hontoria, conocida también como el Asturias Hub de Defensa y en la que participan como empresas constituyentes Danima Ingeniería Ambiental, Expal Systems, Nanoker Research, Ingeniacity, Svmac Ingeniería Sistemas y Vehículos, Triditive, Adaro Tecnología, Estampaciones y Decoletajes Rodisa, Pixelshub, SR7, Alisys Digital, Integral Thermal Shield, Verot, Itemat Mecanización, Militex, Industrial Olmar, ArcelorMittal Investigación e Inversión, Oxiplant, y Microviable Therapeutics.

En la actualidad el hub suma ya 46 compañías asociadas que dan trabajo a 2.500 personas y generan el 15% del PIB. Asturias es la sexta comunidad autónoma con más empleo vinculado al sector de defensa

La jornada divulgativa, que se celebrará el próximo 24 de abril, lleva por título «Forjando alianzas: Perspectivas del sector de defensa en Asturias» contará con la participación del general César Augusto Sáez de Santa María Gómez, jefe de la Oficina de Apoyo Exterior del Ministerio de Defensa además de representantes de varias empresas del sector y entre sus paneles incluye «El Plan de Acción Europeo de Defensa. El fondo europeo de defensa (EDF)» y «Apoyo exterior a la industria de Defensa. La Oficina de apoyo exterior».

El incremento del peso de la industria de Defensa ha sido creciente y además de forma relevante en los últimos años, con una gran variedad de actores pero con un pilar destacado alrededor de la fábrica de armas de Trubia. Santa Bárbara Sistemas cuenta con el contrato para la ejecución del programa VCR 8x8 para la producción de más de 300 blindados que le asegura una carga de trabajo durante al menos cuatro años. No sin polémica porque desde el Ministerio han lanzado varios avisos a la compañía por las demoras en la producción.

A ello se suma que el anuncio de Rheinmetall a finales del año pasado de incrementar la producción de munición de Expal, también en Trubia, duplicando los empleos, que pasarán a rondar los 300 puestos de trabajo

¿Qué pasa con los trenes?

Un efecto paralelo a ese rearme de la industria europeo es la premura por unificar las conexiones de tren, porque toda esa producción tiene que moverse de un lado a otro del continente y en España predomina un ancho de vía diferente, el ancho ibérico. Es precisamente por ese ancho por lo que la llegada de la alta velocidad efectiva a la comunidad no puede alcanzarse hasta que empiecen a circular los trenes Avril (que pueden alcanzar los 300 kilómetros por hora en el ancho ibérico) y que llegan con un importante retraso por parte de la empresa fabricante: Talgo.

Pero en el caso de Talgo hay algo más los anchos vía y que tiene relación con la Defensa. La empresa está inmersa en un proceso de venta con una candidato, Ganz-MaVag Europe Zrt, por delante de los demás pero que ha despertado muchas suspicacias en varias cancillerías. No es extraño, la compañía húngara ha despertado sospechas de estar demasiado estrechamente relacionada con el gobierno del país y su presidente Víctor Orban que en demasiadas ocasiones ha actuado como un caballo de Troya de la Rusia de Putin dentro de la UE.

«Es un problema geopolítico sin duda», señaló este lunes el ministro de Transportes Óscar Puente, «cuando he hablado de esa tecnología de rodadura desplazable [es la tecnología que permite a los vehículos un cambio de ancho automático] quiero que se sea consciente de que esta es una tecnología crítica. Yo he ido a repúblicas bálticas hace poco porque allí se está desarrollando un proceso de alta velocidad en el que están implicadas hasta 50 empresas españolas y allí me hablaron poco de alta velocidad, que se da por hecho, de lo que me hablaron fue de movilidad militar. Y, ojo, porque el contexto no es fácil y Talgo tiene un material muy sensible».

Es por eso por lo que Puente recalcó que está a la espera de que se constituya una alternativa española por parte de otros inversores, con el auspicio del Gobierno de España si fuera necesario según declaró ayer en unos desayunos informativos de Europa Press. «Observamos la OPA con el máximo cuidado y a la espera de que otros actores entren en juego, entre los que se encuentran inversores y otros fabricantes. Se puede constituir una alternativa sin el auspicio del Gobierno, pero si hubiera que auspiciarla, valoraríamos esa opción. En eso estamos», dijo.

Puente no cree que las fábricas de Ganz-Mavag en Hungría tengan la capacidad suficiente para resolver todos los problemas de producción que tiene Talgo. «La tecnología de Talgo es muy moderna. No tenemos muy claro que las fábricas de Hungría tengan la capacidad para, en el corto plazo, resolver el problema de falta de producción que tiene Talgo. No es lo mismo tener una fábrica ahí, bueno, pues medio vacía, con una mano de obra acostumbrada, por ejemplo, a amolturar, que la tecnología de soldadura de aluminio. No parece que sea eso tan fácil de hacer en Hungría como se dice», ha justificado.